Hay muchos festivales dignos de mención en Japón, y uno de ellos es el Tsukimi, que consiste en la contemplación de la Luna durante unas determinadas fechas.
Historia del Tsukimi
Esta tradición no es puramente japonesa, sino que fue adoptada de China. En Japón comenzó a celebrarse hace más de 1500 años, lo que da una idea de hasta qué punto está ya arraigada en la cultura nipona.
Como en otros casos, esta era una tradición que se limitaba a las clases altas de la sociedad, las cuales se reunían el primer día de otoño que hay luna llena para observar el reflejo de la Luna desde sus embarcaciones y leer Tanka, un tipo de poesía japonesa. En ese día, supuestamente, y según la tradición budista, se podía ver a los conejos en la Luna.
La tradición se popularizó posteriormente durante la era Edo, y la mitología japonesa varió ligeramente la historia de los conejos. La interpretación actual es que, si se observa con atención, se puede ver la figura de un conejo amasando mochi, una pasta de arroz típica de Japón.
El orígen de la vinculación entre ambos elementos, el conejo y la Luna, procede de una leyenda budista, por la cual, Buda, en una de sus reencarnaciones, se convirtió en conejo, y propuso a sus amigos, una zorra, un mono y una nutria, buscar comida para dar a los hambrientos en los días de luna llena.
Pero mientras sus amigos trajeron diferentes alimentos, el buda-conejo solo comía hierba y por tanto eso era lo único que podía ofrecer, algo que los humanos no comen. En compensación, ofreció al Rey del Cielo su propia carne.
El rey del cielo encendió entonces un fuego y el conejo saltó dentro de él, pero para su sorpresa comprobó que no quemaba. Entonces el Rey del Cielo le dijo que, como recompensa a su buena voluntad y su valentía, dibujaría su figura sobre la Luna para que todas las generaciones venideras pudieran recordarlo.
En realidad, con independencia del orígen y de la interpretación, el Tsukimi es como tantos otros festivales en Japón, es decir, una excusa para reunirse con las amistades de celebración.
En teoría esta ofrenda a la Luna se hace para dar las gracias por las cosechas de verano y pedir por que las de otoño sean abundantes, pero como casi siempre ocurre -no hay más que comprobar la cada vez menor huella religiosa de una celebración como la Navidad en el mundo occidental para darse cuenta de que no es muy distinto- el festival pone su foco más en la comida y el componente social del evento.
Adornos y platos típicos
El festival Tsukimi tiene una serie de alimentos típicos que se consumen como ofrenda. El principal es el Dango, una bola de masa de mochiko (harina de arroz), es decir, lo mismo que supuestamente el conejo de la Luna amasa en esta festividad.
Pero también es típico comer verduras y frutas, como boniatos, castañas y judías y beber sake, cerveza o té verde.
Otras comidas propias de esta festividad son el tsukimi soba y el tsukimi udon, o lo que es lo mismo, fideos soba o udon hervidos a los que se les coloca un huevo crudo por encima y alga nori y se les añade caldo de pollo.
De hecho, la celebración del Tsukimi tiene una vinculación tan importante con la gastronomía que en la cultura japonesa, cualquier plato o alimento al que se le coloque un huevo por encima se le conoce como Tsukimi, por aquello del parecido con la luna.
Hasta McDonalds ha sacado unas hamburguesas con huevo que promociona especialmente en estas fechas a la que llama Tsukimi burger.
Y como no podían faltar los dulces durante el Tsukimi también se comen unos pastelillos llamados Geppei, que puede traducirse como “Pastel de Luna”.
La decoración no ocupa un papel tan protagonista como la gastronomía, pero aun así merece al menos una mención. Durante este periodo es habitual decorar con helechos y con una planta autóctona llamada susuki. También pueden verse decoraciones inspiradas en conejos.
¿Y qué se hace además de comer y beber mientras se contempla la Luna llena? Pues entre las tradiciones vinculadas a esta celebración están la de pedir deseos y la de escuchar o tocar música de koto, un instrumento de cuerda, o el shakuhachi, una especie de flauta.
¿Cuándo se celebra?
Las fechas de celebración del Festival Tsukimi no son fijas, sino que varían de año en año. En concreto el inicio se establece en el decimoquinto día del octavo mes del calendario lunar, de manera que en el nuestro, tal día cae en un rango de fechas que va entre mediados de Septiembre a principios de Octubre.
Debes tener en cuenta a la hora de comprar tu billete de avión y Japan Rail Pass que las fechas establecidas para la celebración del Tsukimi en el presente año y en el siguiente son el viernes 13 de Septiembre de 2019, y el jueves 1 de Octubre de 2020. A partir de ellas se contabilizan dos semanas, que es el periodo de duración de esta celebración.
El por qué se eligió esta época para la celebración de la contemplación de la Luna no es tampoco ningún misterio. Debido a la posición del satélite en relación a la Tierra es el periodo en el que la Luna puede apreciarse más claramente y con un mayor brillo.
Y básicamente esto es lo principal que tienes que saber en cuanto al festival Tsukimi. Si las fechas de tu viaje se enmarcan entre Septiembre y Octubre vas a tener oportunidad de disfrutar de uno de los periodo más bellos del año en Japón y de esta festividad tan arraigada en su cultura.
Asegúrate de hacer coincidir tu estancia en Japón con la celebración del Tsukimi y no olvides adquirir tu Japan Rail Pass para disfrutar de este maravilloso festival, no te arrepentirás! Además de para contemplar la Luna, te servirá para conocer un poco mejor la gastronomía y las tradiciones del país.